Kenia, el líder económico de África del este

Natalia Fernández Márquez.

Kenia, o la República de Kenia, es un país del este africano que consiguió su independencia en 1963 y comparte fronteras con Etiopía, Somalia, Tanzania, Uganda y Sudán del Sur. La capital es Nairobi y tiene una población de 47,6 millones de habitantes, de numerosas culturas y orígenes.

Este país es el líder  económico en la región, con el PIB per cápita más alto. Esta condición se debe a varios factores. En primer lugar, el país ha conseguido diversificar su economía, no solo dependiendo de la agricultura, sino también desarrollando sectores como el turismo y la manufactura. Por otro lado, tiene una infraestructura relativamente sólida en comparación con los países de alrededor, pues cuenta con puertos desarrollados, como el puerto de Mombasa, que es un importante centro de comercio para la región. En cuanto al comercio, Kenia es un centro regional para negocios y comercio en África del Este, gracias a su ubicación geográfica estratégica y las conexiones de transporte. 

Además, en los últimos años, su gasto en educación y capital humano ha aumentado, lo que ha resultado en una mano de obra relativamente capacitada. En el ámbito político, se puede considerar uno de los países más estables de la zona, a pesar de algunos desafíos sociales. Esta estabilidad política es esencial en el país para atraer inversiones y promover el desarrollo económico. En este sentido, Kenia ha intentando mantener un papel activo en la comunidad internacional y ha sido sede de importantes conferencias y organizaciones, destacando el Acuerdo de Libre Comercio Continental Africano para promover el comercio dentro del continente y las discusiones sobre cambio climático y conservación de la vida silvestre.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que, aunque Kenia es uno de los países más desarrollados en la región, todavía enfrenta desafíos económicos significativos como la pobreza, la desigualdad y las constantes fluctuaciones en los precios de productos básicos (períodos de inflación muy alta y épocas de deflación) . 

En resumen, Kenia ha experimentado cambios económicos significativos y desafíos políticos a lo largo de los años, pero a pesar de los obstáculos, el país ha buscado un papel destacado en la región y en el ámbito internacional.